Coordinación policial: pilar de la seguridad nacional.

Transcribo por su interés nota del Sindicato Unificado de Policía. Para mí es realmente preocupante que aún estemos así. No sé qué parte de verdad hay en este comunicado pero el simple hecho de su existencia, dice muy poco a favor de la debida coordinación y cooperación entre Guardia Civil y Cuerpo Nacional de Policía. ¿Es esto el fruto del Mando Unificado? ¿Es que el 11-M no nos enseño nada? El Sr. Mesquida tiene mucho que auditar dentro de su casa.

El Gobierno no cumple la ley y desprecia a los Miembros del Cuerpo Nacional de Policía

Ayer y hoy, diversos medios de comunicación se hacen eco del envío a Portugal de un juez, un fiscal y cuatro miembros del Cuerpo de la Guardia Civil para investigar si ETA tiene cobertura en dicho país. Al no haber sido desmentida dicha información por el Ministerio del Interior, la damos por confirmada.
Las competencias y ámbito de actuación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, el Cuerpo Nacional de Policía y la Guardia Civil, están contenidas en la ley orgánica 2/86 de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. El artículo 12 A) f) asigna al Cuerpo Nacional de Policía las relaciones con otras policías.
Además de esta disposición legal, que como todas admite interpretación, no es comprensible la decisión adoptada por el Ministerio del Interior que, siguiendo la línea de los primeros gobiernos socialistas, abunda en dar trato preferente al Cuerpo militar de la seguridad en España en detrimento del Cuerpo civil, que es quien debería llevar la dirección de los servicios de investigación criminal.
Esta “patología”, típica de pijos rojos cuando llegan al poder, supone un desprecio al trabajo profesional de más de cincuenta mil miembros del Cuerpo Nacional de Policía, que ven como sistemáticamente son ninguneados a pesar de que su trabajo profesional no se merece el trato que reciben de los responsables políticos. La politización y el amiguismo en los nombramientos en este Cuerpo propicia que se puedan llevar a cabo estos desprecios sin que nadie levante la voz, ni el director adjunto operativo, ni el Comisario General de Información, ni los miembros del CNP destinados en la Secretaría de Estado de Seguridad, ni el director general de la Policía y la Guardia Civil.
Todos los responsables políticos saben que la mejor forma de impedir una colaboración es colocar al frente de una investigación a la Guardia Civil, porque nunca actúan conforme a las directrices de compartir la información con el CNP. El último ejemplo lo hemos tenido con la investigación en torno a “El Solitario”, en la que habiendo tenido semanas antes la misma confidencia que el CNP, ni informaron, ni solicitaron autorización judicial para no tener que informar. Y el penúltimo, aún no sabemos nada del vehículo de Ayamonte o de los motoristas (que no eran ni delincuentes ni de ETA) que rompieron un cristal para llevarse documentos y efectos de su interior.
Si durante unos años la Secretaría de Estado de Seguridad ha venido restando competencias a la Policía para atribuirlas a la Guardia Civil mediante el sistema de unidades o servicios compartidos, ahora ni siquiera se aplica dicha fórmula. Ningún país europeo occidental plenamente democrático deja la dirección de la seguridad de su país en un Cuerpo militarizado. Vale que estén vds. Subyugados por la aparente disciplina del Cuerpo militar, pero si quieren darle más competencias que las que les atribuye la ley, al menos debieran tener la decencia de desmilitarizarlos y convertirlo en un cuerpo de policía civil.
En materia de lucha contra el terrorismo, como en cualquier otra, el CNP admite cualquier comparación y en cualquier periodo de tiempo, más allá de las habituales campañas favorables al cuerpo hermano, convertido en supuesta esencia de la patria desde planteamientos casposos que el Gobierno parece querer abrasar.
La Guardia Civil no precisa esas campañas, ni que se vulnere la ley para que sus excelentes profesionales actúen. Otra cosa es esa cúpula de mando militar que pretende mantener la seguridad de este país en los métodos y procedimientos de tiempos felizmente pasados. ¿Cuándo seremos, a efectos de seguridad, un país que se pueda homologar con los más avanzados de Europa? ¿Cuándo la Constitución y la ley estarán por encima de uniformes, Cuerpos y militares en España?

Madrid, 27 de agosto de 2007.

COMISIÓN EJECUTIVA NACIONAL