Blog de seguridad y defensa
Mostrando entradas con la etiqueta líbano. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta líbano. Mostrar todas las entradas

martes, 24 de junio de 2008

Mentiras arriesgadas.


Ha sido caer el debate de los blindados en el ámbito político y ya ha comenzado a apestar. Los nervios parecen aflorar en seguida en algunos. Pocas horas después de que la Sra Rodríguez Salmones pidiese explicaciones sobre la sustitución de los BMR, el Sr. Cuadrado, portavoz de defensa del PSOE en el Congreso de la Nación, ha afirmado que:

“…los blindados BMR (blindados medios de ruedas) que actualmente utilizan las tropas en Afganistán y Líbano 'no son de hace 30 años; lo que es de los años 80 es el modelo original, que desde entonces se ha ido modernizando y mejorando'.
'Nuestra tropas cuentan con blindados BMR muy modernos, algunos de uno o dos años de antigüedad, que compiten con los de Italia o Estados Unidos', ha afirmado.”

Bueno, bueno Sr. Cuadrado, vaya templanza. Así da gusto. Mintiendo y manipulando desde el minuto uno. Mal empieza Señoría.

MIENTE, miente de manera deshonrosa e irresponsable. Desde aquí con humildad se le recomienda un poco de calma. Para estar en este negocio hace falta no dejarse llevar por la bilis. Pregunte entre los sus colegas socialistas, pregunte a los que saben de esto, que en el PSOE hay unos cuantos.

Por cierto, no se olvide de pasar por la quilla al General Jefe de la Brigada Legionaria (General Jefe de Brigada en FINUL) que en directo le dijo a su ministra que los BMR ya no aguantan más. Lo cual no dudo que ya tenían descontado algunos como Vuestra Señoría.

Cada día me cabe menos duda de que para que los nuestros se dejen la vida innecesariamente en nuestras fronteras lejanas hace falta el concurso de unos cuentos cooperadores necesarios.

Cooperadores necesarios que no se han aclarado oficialmente en la muerte de seis paracaidistas hace justo un año. El actual General Jefe de las fuerzas españolas en FINUL seguro que lo tenía bien presente cuando dijo lo que dijo. Un año y ni un solo informe oficial sobre los responsables. Los mismos BMR, los mismos inhibidores inoperantes, los mismos enemigos sin identificar...

No debería haber problema en publicar oficialmente lo que ya muchos saben: que en realidad algunos cooperadores necesarios están entre nosotros, incluso a alguno se le puede llegar a entregar Toisones de oro.

P
.S. Hoy en ABC: "Los vehículos blindados BMR tienen un mantenimiento «escaso» y son «inestables»"

sábado, 21 de junio de 2008

Cooperadores necesarios.


Los accidentes ocurren. Con esta simple e indiscutible afirmación parece darse a entender que lo ocurrido en un accidente es inevitable. Así, sin más, los accidentes ocurren.

Desgraciadamente no es tan fácil. Todo accidente necesita de la alineación de una serie de causas concatenadas que individualmente no son suficientes pero que, eso sí, son todas necesarias. Estas causas por tanto son cooperantes necesarios para que la circunstancia final se produzca.

Si alguna de estas circunstancias de la cadena necesaria se produce por “una omisión de la conducta debida para prever y evitar el daño” o “la voluntaria omisión de diligencia en calcular las consecuencias posibles y previsibles de un hecho” se entra en los terrenos de la culpa civil o penal.

Esta semana he tenido tiempo, y suficiente proximidad, para pensar en estos hechos con detalle. El volar en líneas aéreas ucranianas por dos veces, y conocer de cerca los estándares de seguridad allá donde Rusia y la OTAN juegan su enésima partida, tengo que reconocer que me ha ayudado.

Desgraciadamente a lo largo de la semana, aunque he sabido sobre lo ocurrido en El Líbano y en Bosnia, no he podido decir nada sobre el asunto. Hoy, recién llegado, con casi todo leído sobre el asunto, me reafirmo en todo lo dicho en Del mando, de Yaks-42 y de MRAP.

Tanto en el caso del Yak-42, como en el de los BMR, como en el del estado crítico (mejor leer comentarios) en que se encuentran nuestras FAMET sólo puedo decir que los accidentes no ocurren porque sí. Las culpas negligentes para que esto se siga produciendo con MAYOR FECUENCIA DEMOSTRADA que en otras FAS de nuestro entorno son largas, y el concurso de todas ellas, inevitablemente necesario.

Y para que las circunstancias adecuadas para los accidentes se alineen perfectamente, y se produzcan las bajas, se necesita del concurso de muchos, algunos en la cadena de mando, y algunos muy alejados, pero todos ellos cooperadores necesarios con los IEDs de todo tipo y forma.

Siempre
por tanto es necesario el concurso de indolentes, complacientes, idiotas, irresponsables, fariseos, judas, vagos, y algunos incluidos en varias de estas categorías, para que un accidente se produzca. Algunas veces son procesados, la mayor parte de las veces siguen con su vida como si nada.

El 25 de junio próximo este observatorio cumple un año, y cada día me doy cuenta que veo las cosas con mayor pesimismo, y sé que eso no es bueno. También es verdad que en el último año he escuchado cosas que jamás me hubiese gustado saber.

Sólo puedo añadir mi más sincero pésame a los familiares y amigos, y a sus unidades. Descansen en paz, sólo por ellos merece la pena seguir en esto.

Cabo legionario D. Yeison Felipe Ospina Vélez
Sargento D. Joaquín López Moreno
Teniente D. Santiago Hormigo Ledesma
¡Con nosotros!

martes, 29 de abril de 2008

Mil excusas. Ningún MRAP.


Ya mostré este video antes. Hoy lo repito para los que aún tienen mil excusas, mil razones, mil losientos, mil paciencias...que miren a la cara a estos buenos paracaidistas españoles -casi todos muertos- y que se pregunten si hay algo que justifique la indecencia de no proporcionarles unos medios que -ya que les maniatan de pies y manos frente a las amenazas- al menos les protejan adecuadamente.

Si son verdad, me dan lo mismo las miserias de partido, de región, de burocracia o de empresa. Los que las practican y amparan son MISERABLES que no conocen el valor de la vida. IRRESPONSABLES que no debieran de tener la más mínima capacidad de mando o decisión. Por muchos votos, muchas estrellas y bastones, o muchas acciones empresariales que les respalden.

Así los confunda Dios a todos cuando se nos pidan cuentas.

lunes, 24 de marzo de 2008

2018: Operaciones complejas en estados frágiles o fallidos, cambio climático y escasez de recursos vitales.


“Nos encontramos, pues, dentro de un nuevo escenario estratégico en el que la política de seguridad demanda planteamientos novedosos y cambios de mentalidad, de un modo especial en lo que se refiere a la gestión de crisis y resolución de conflictos y a la necesidad de adaptación de las FAS a las circunstancias de cada momento”. Directiva de Defensa Nacional 1/2004. Punto 1: El Escenario Estratégico. Presidente del Gobierno.

“The UN predicts that there will be millions of "environmental" migrants by 2020 with climate change as one of the major drivers of this phenomenon. Some countries that are extremely vulnerable to climate change are already calling for international recognition of such environmentally-induced migration. Such migration may increase conflicts in transit and destination areas. Europe must expect substantially increased migratory pressure”. Informe del Alto Representante y Secretario General de la UE al Consejo Europeo. Bruselas, 3 de marzo de 2008.

¿Cual es la hipótesis más probable de empleo de nuestras FAS en 2018? Esa es la pregunta del millón; de euros eso sí. Pues para aquellos que tengan prisa y no quieran leerse todo el rollo que hay escrito tras esto, ahí va: lo más probable será que nuestras operaciones militares estén de vuelta a nuestra ya conocida zona de operaciones del norte de Africa, pero no por un conflicto abierto con Marruecos, como desde hace tiempo llevamos preparando, sino para realizar operaciones de estabilización y reconstrucción en ambiente complejo de algún estado fallido o sobrepasado por los efectos expansivos con los que le cambio climático premiará a África el los próximos 15 años. Para el que aún siga interesado continúo.

Una de las principales lecciones que hemos aprendido de los salvajes ataques terroristas ocurridos desde principios del SXXI a lo largo y ancho del planeta es que los estados fallidos cuentan mucho[1]. Cuentan por razones humanitarias y de estabilidad regional -como ya acordamos en occidente desde principios de los 90-, pero además cuentan por motivos fundamentales de seguridad nacional y compartida.

Y es que estos estados han aparecido brutalmente en nuestro panorama de seguridad clarificando por completo el confuso escenario estratégico surgido tras la Guerra Fría. Como afirmó Javier Solana en su conferencia “Algunas reflexiones sobre la actualidad internacional” en el Real Instituto Elcano: “Podemos enterrar definitivamente el mundo que vivimos, de forma fugaz, al final de la guerra fría”.

Afganistán, Kosovo, Bosnia, El Chad, Somalia, Liberia, Sudán, RDC, Irak, El Líbano y tantos otros, se han convertido –cada uno por motivos distintos- en territorios que de un modo u otro han acogido, promovido, tolerado o simplemente alojado, a redes terroristas, a bandas de crimen organizado, a organizaciones de tráfico de drogas y armas y a mafias de tráfico de personas, que de un modo u otro nos han acabado afectando.

Se ha demostrado firmemente que dejados en un limbo de abandono estos estados se convierten en intersticios sin vigilancia donde proliferan las amenazas que tarde o temprano nos golpean en nuestros pretendidamente seguros territorios pero además, también se ha demostrado que se convierten en focos de injusticia, inestabilidad, desigualdad y desgobierno que activan espirales de violencia en sus poblaciones y en las de los países colindantes.

Este cambio profundo del panorama estratégico nos ha abierto los ojos a una compleja realidad que la Guerra Fría tenía escondida bajo la alfromba que desplegó sobre todo el globo. Nueva realidad que poco a poco ha ido apareciendo reflejada en las estrategias de seguridad de la UE[2], de EEUU[3], del Reino Unido[4] y en nuestros documentos de referencia estratégica: la Estrategia Militar Española[5], la Directiva de Defensa Nacional 1/2004[6] y la Ley de Defensa Nacional 5/05[7].

Y
dado que, como ya anuncian nuestras estrategias, las emergentes y ya presentes nuevas amenazas para la seguridad están estrechamente relacionadas con los estados fallidos, y que para contrarrestarlas proliferan –y proliferarán en el futuro- las acciones de prevención, estabilización y reconstrucción de éstos, parece lógico pensar que es necesario plantearse la mejora de la eficacia de las herramientas nacionales involucradas en estas labores, todas ellas.

Tres acotaciones a la anterior afirmación han de hacerse previamente al desarrollo
del resto del razonamiento:

1. Los es
tados fallidos son, o pueden ser, cobijo de las nuevas amenazas ya enumeradas (terrorismo trasnacional, traficantes de inmigración ilegal, crimen organizado, armas de destrucción masiva) por su incapacidad de hacer imperar la ley en sus respectivos territorios. Pero además, otros nuevos ambientes de riesgo que se ciernen sobre la seguridad y la estabilidad mundial (competencia por los escasos recursos energéticos futuros, la pobreza y desigualdades crecientes y el cambio climático principalmente[8]) tendrán especial cruel influencia sobre precisamente estos estados fallidos –o a los denominados frágiles- multiplicando la amenaza debido a los efectos peligrosos que desencadenarán como guerras civiles, éxodos masivos, limpiezas étnicas, pandemias, hambrunas y radicalización. Según un reciente informe de International Alert[9] hay 46 estados en el mundo que pueden ver disparadas sus ya altas tensiones internas y externas desembocando en distintos tipos de conflictos armados a causa del cambio climático y 56 con riesgo alto de desestabilización política. Entre los primeros se encuentra Argelia, Senegal, Gambia, Guinea, Ghana, Costa de Marfil, Nigeria, Sierra Leona, Chad, RDC, Burundi, Israel, Líbano, Jordania, Pakistán y Afganistán; entre los segundos se encuentran Marruecos, Mauritania, Sahara Occidental, Libia, Egipto, Albania y Kosovo. No es necesario remarcar el carácter de vital que la estabilidad en muchos de los apuntados representa para nuestra seguridad integral.


Evolución del potencial de exportación de gas a la UE. Fuente: OME.

2. Hemos de hablar de herramientas en plural porque la acción de España, la de otros estados aliados, y la de de las organizaciones de seguridad y defensa a las que pertenecemos, no es esencialmente militar. En otras palabras, la respuesta más eficaz a las potenciales crisis en estos estados no se debiera articular principalmente con herramientas de defensa. En lo posible los estados fallidos se han de prevenir antes de que le caos impere en ellos. Para eso nuestras acciones se han de encaminar a actuar con prontitud ante los primeros síntomas de deterioro en aquellos lugares de marcado interés estratégico. Cuando la herramienta militar toma el protagonismo debería significar que o por descuido, o por la rapidez de los acontecimientos, o por falta de eficacia de las medidas adoptadas, las acciones preventivas de carácter diplomático, económico, de asistencia y asesoramiento técnico y de cooperación al desarrollo han fracasado. Desgraciadamente, la experiencia reciente nos enseña que esto no suele ocurrir así. Normalmente se llega tarde a la prevención del conflicto, y la actuación internacional ha de comenzar con una intervención militar que asegure un espacio que permita la actuación de esas otras herramientas nacionales o internacionales.

Las áreas que más se verán afectadas por el cambio climático. Fuentes: Columbia University en el The Economist.

3. No todos los estados frágiles o fallidos serán motivo de intervención por parte de España y/o sus aliados en el futuro. Por supuesto se requiere una reflexión estratégica profunda que conduzca a una delimitación clara, realista y limitada, de cuales son aquellas zonas del planeta que por su directa influencia en nuestra seguridad nacional y/o compartida son susceptibles de desencadenar acciones de prevención, estabilización y reconstrucción. A tal efecto una estrategia integral de seguridad nacional que los contemplase explícitamente y que sirviese de guía a todas los departamentos y organizaciones nacionales e internacionales sería muy útil y recomendable. Pero además hay que tener en cuenta que ninguna de estas crisis son iguales, todas comparten bases conceptúales similares pero ninguna se puede abordar con respuestas estandarizadas. El determinar cual es la aproximación correcta a cada conflicto o crisis, y las consecuencias de las acciones que se planteen, es un esfuerzo intelectual que se requiere hacer a nivel precisamente estratégico. Las experiencias más recientes –desde UNPROFOR en Bosnia o la intervención en Kosovo y Afganistán hasta la invasión de Irak- han demostrado que carecer de una hoja de ruta clara, planeada hasta el detalle y valorada en todas sus consecuencias, es apostar en una ruleta rusa muy peligrosa.

Una vez hechas estas tres aclaraciones a la formulación principal, se debería concluir que la prevención, estabilización y reconstrucción de estados frágiles o fallidos es una tarea fundamental –sino la más fundamental- para la creación de ambientes seguros internos y externos; y que además de ser nuestra realidad actual fundamental en el ámbito de la acción exterior, es casi con toda probabilidad el entorno en el que nos desenvolveremos durante los próximos treinta años.

Evolución previsible de la amenaza proveniente de la combinación de estados fallidos de nuestro entorno y los nuevos ambientes multiplicadores (cambio climático y competición de recursos vitales). Fuente: elaboración propia.

Pero yendo más allá, deberíamos concluir que los estados fallidos y frágiles que se producirán y multiplicarán como consecuencia de los nuevos ambientes que se nos avecinan y los conflictos híbridos[10] que les rodean –y rodearan-, así como los actores que encuentran acomodo en los vacíos de poder que generan, son casi con toda probabilidad la principal amenaza futura para nuestra seguridad y las de nuestros vecinos mediterráneos de los que dependen sobremanera nuestra estabilidad económica, comercial, energética y social; al fin y al cabo nuestra seguridad y la de países de cuya estabilidad dependemos.



En rojo los países con alto riesgo de conflicto armado potenciado por el cambio climático en rojo. En naranja, países con grave riesgo de desestabilización debido a las tensiones que producirá el cambio climático. Fuente: Internacional Alert 2007.

Si convenimos por tanto que estas situaciones de conflictos híbridos en estados fallidos o frágiles de interés estratégico para nuestra seguridad son la amenaza principal a la que nos enfrentaremos en un futuro, y que forman ya parte fundamental de nuestro presente, deberíamos inferir que será también cada vez más habitual que las autoridades políticas se vean obligadas a actuar sobre estas situaciones para intentar contener sus consecuencias sobre nuestros intereses nacionales. Y desde luego una de las herramientas –no la única desde luego- que utilizarán habitualmente serán nuestras FAS.

Finalmente, y si este análisis es acertado, cabe preguntarse si estamos preorando nuestras FAS para lo que vendrá o las seguimos preparando para la Guerra del Golfo de 1991. Desde luego es un vicio político-militar habitual -aquí y en Pernambuco- prepararse para la guerras ya acabadas. EEUU lo está pagando muy caro.

En mi opinión, nuestro futuro está inevitablemente unido a conflictos híbridos donde deberemos desarrollar acciones exteriores integrales de seguridad, estabilización y reconstrucción en ambientes tremendamente complejos donde grandes concentraciones de desplazados intentarán acceder a los recursos vitales estén donde estén, donde la radicalización será creciente y por tanto el temido binomio insurgencia-terrorismo proliferará, y donde las estructuras de los estados estarán completamente colapsadas.

Y muy probablemente esto ocurrira en el Norte de África, donde nuestros intereses energéticos, de estabilidad regional y territoriales son verdaderamente vitales, ya hoy.

[1]La primera estrategia de seguridad librada tras el 11S fue la estadounidense de 2002. Textualmente afirmaba: “America is now threatened less by conquering states than we are by failing ones”. National Security Stratregy. Presidente de los EEUU. Septiembre de 2002.
[2] Del punto I (Nuevas Amenazas) del documento “Una Europa segura en un mundo mejor”: “Estados en descomposición y delincuencia organizada: Cuando los Estados se descomponen, la delincuencia organizada toma el relevo. Las actividades delictivas que se desarrollan en estos países afectan a la seguridad de Europa”. Pág. 6.
[3] Del la National Security Strategy 2006: “The goal of our statecraft is to help create a world of democratic, well-governed states that can meet the needs of their citizens and conduct themselves responsibly in the international system” . Pág. 1. “If left unaddressed, however, these different causes lead to the same ends: failed states, humanitarian disasters, and ungoverned areas that can become safe havens for terrorists”. Pag 15.
[4] De la National Security Strategy 2008 del Reino Unido: “Currently, most of the major threats and risks emanate from failed or fragile states”. Punto 3.21. Pág. 14.
[5] Estrategia Militar Española. EMAD. Punto 41. Pág. 16.
[6] Ver cita inicial de esta introducción.
[7] De la exposición de motivos de esta ley: “Disminuyen las guerras de tipo convencional, pero proliferan conflictos armados que, tanto por sus causas como por sus efectos, tienen implicaciones notables más allá del lugar donde se producen”
[8] Sobre este asunto cabe destacar que hay tres documentos definitivos que advierten que las duras repercusiones (hambrunas, radicalización y guerras civiles) del cambio climático en estados frágiles/fallidos será probablemente la peor amenaza futura a medio-largo plazo para nuestra seguridad y la de nuestros aliados. A saber: “National security and the threat of climate change” de la CNA Corporation en octubre de 2007, “Climate change and international security” del Alto Representante de la UE al Consejo de la Unión Europea de marzo de 2008 y la “National Security Strrategy” del Gobierno del Reino Unido en marzo de 2008. Textualmente del segundo selecciono: “Climate change is best viewed as a threat multiplier which exacerbates existing trends, tensions and instability. The core challenge is that climate change threatens to overburden states and regions which are already fragile and conflict prone. It is important to recognise that the risks are not just of a humanitarian nature; they also include political and security risks that directly affect European interests”. Del ultimo selecciono: “Climate change is potentially the greatest challenge to global stability and security, and therefore to national security”.
[9] A climate of clonflict. Dan Smith y Janani Vivekananda. International Alert. Noviembre de 2007.
[10] El concepto “guerras híbridas” creado por Hoffman y Mattis es probablemente el concepto que mejor se ajusta a los conflictos que afrontamos –y afrontaremos- en del siglo XXI. Estos dos autores opinan que es simplista diferenciar los conflictos en parcelas conceptuales estancas como baja y alta intensidad, mantenimiento de la paz y guerra, regular e irregular, contrainsurgente o de reconstrucción, y que los conflictos se plantean siempre complejos, multiformes y en cierto modo confusos. Los adversarios no estatales que proliferan en los estados fallidos son cada vez más flexibles y sofisticados en sus métodos y entienden que la consecución de sus objetivos requiere de la utilización oportuna de todos las herramientas a su alcance (terrorismo, insurgencia, subversión, desplazamientos de población, acciones convencionales, asaltos al poder estatal y limpiezas étnicas) siempre que sean adecuadas para alcanzar sus objetivos.

lunes, 24 de diciembre de 2007

Feliz Navidad.

¡Feliz Navidad a todos sin excepción!

Aunque algunos desgracidamente faltan en casa y eso seguro que hará que sean unas Navidades difíciles para su familia.

Para los que están fuera y volverán, sólo decir que cuando vuelves aprecias más los cariños que tienes, y los que aquí dejas.

Para los que ya nunca volverán...nada. Nada se puede decir cuando se producen estos vacios. Sólo cabe recordarles con respeto y agradecer su sacrificio.

El de todos, porque las tropas españolas han sufrido un total de trece bajas en misiones en el exterior en 2007 (seis en Líbano, tres en Kosovo y otros cuatro en Afganistán)- Y no sólo los que el jefe del Ejecutivo recuerda : "los diez soldados dignos y valientes que han perdido la vida víctimas de atentados" a lo largo del último año.

Lamentable error, descuido o absurda distinción señor Presidente. Lamentable hablar de atentados y no ataques, y lamentable no recordar a todos sin excepción.

En la casa de todos ellos no se pasará bien esta noche. Por mi parte sólo puedo recordarles como creo que se merecen, con sus nombres y apellidos y en acto de servicio:

  • La soldado Idoia Rodríguez de la BRILAT en febrero de 2007 falleció al pisar el BMR que conducía una mina en Shindad (Afganistán).
  • El 24 de abril el soldado José Javier Colorado, destinado en el Regimiento de Infantería Acorazado 61, perdió la vida al volcar el vehículo blindado BMR en el que viajaba hacia el Valle de Osojane (Kosovo).
  • El sargento de Infantería Juan Antonio Abril Sánchez murió el pasado 26 de mayo al volcar su vehículo todoterreno VAMTAC mientras realizaba una patrulla de reconocimiento en la provincia de Badghis.
  • En julio de 2007 seis paracaidistas españoles: Jeyson Alejandro Castaño, Jonathan Galea, Manuel David Portas, Yhon Edisson Posada, Jefferson Vargas y Juan Carlos Víllora murieron al explotar un coche bomba al paso de su BMR por la aldea de Sahel al Derdara (El Líbano).
  • El pasado 24 de septiembre un artefacto activado a distancia con cable acabó con la vida de los caballeros legionarios paracaidistas Stalyn Mera Vera y Germán Pérez Burgos mientras realizaban una patrulla en BMR en Afganistán .
  • El 17 de octubre fallecieron el cabo Francisco Javier Roldán Naranjo destinado en la Agrupación de Apoyo Logistico (AALOG) 81 y el cabo Antonio Jesús Bonilla Ríos con destino en el Regimiento de Infantería Mecanizada 'La Reina' número 2 de Córdoba al sufrir un accidente en Istok (Kosovo) mientras realizaban una patrulla ordinaria en un vehículo Anibal.

Trece hombres y mujeres que dejaron su vida por todos nosotros allá donde se les ordenó, en silencio y con honor. Menudo pelotón, menudo ejemplo.

Muchas veces los más humildes son los mejores, y a veces los puedes tener muy cerca, incluso puede que un día llamen a tu puerta, como en Belén.

domingo, 9 de diciembre de 2007

NO CONVIENE OLVIDAR.

Para que nadie olvide en los despachos de la Castellana...
Para que nadie se duerma en los brazos de la burocracia...
Para que ninguno olvidemos, al calor de la seguridad de nuestras sillas,...
Hay una deuda pendiente que es promesa para antes de fin de año.
Yo no lo olvido.

domingo, 23 de septiembre de 2007

Ni una baja más.


ADVERTENCIA: esta entrada ha sido recortada en su inicio original por respeto a lo ocurrido al día siguiente de ser publicada.
Y lo mío es que tras el éxito de campañas vecinas yo reemprendo la mía propia, la cual empecé con poco éxito debido, creo yo, a la falta de un buen lema; pero que es tan humanitaria como las de otros pues también va enfocada a salvar vidas . Es por ello por lo que he optado para esta segunda fase por un lema original y complejo:
¡MRAPs YA!


Para el que ande perdido, MRAP se utiliza en el ámbito de los vehículos blindados militares y es el acrónimo de Mine Resistant Ambush Protected o lo que es lo mismo resistente a minas y protegido frente a emboscadas. Para ejemplo el COUGAR del USMC de la foto superior. Quizás los legos en la materia también se pregunten con cierta sorpresa si es que no tenemos nosotros de esos MERRAPOS en nuestras FAS. Pues la respuesta es no.

No absoluto cuando hablamos de el BMR (Blindado Medio Ruedas que sirve de fondo al encabezamiento de este blog), vehículo que ha dado un resultado excelente y que es el vehículo base de todas nuestras misiones en el exterior, pero que está completamente obsoleto. Por debajo, por donde atacan -ahora y siempre- las minas y sus primos los IEDs, son autenticas latillas de sardinas. Y por los laterales tampoco valen para mucho.

Desgraciadamente en España tenemos experiencia sobre esto adquirida a golpes, pero parece que aún así ninguna lección ha calado entre los responsables, y por tanto tampoco en la sociedad, sobre el asunto.
La soldado Idoia Rodríguez en febrero de 2007 falleció al pisar el BMR que conducía una mina en Shindad.


El BMR del que era conductora Idoia tras el ataque. Aquí un COUGAR tras un ataque parecido, en este caso no hubo siquiera heridos.

En julio de 2007 seis paracaidistas españoles: Jeyson Alejandro Castaño, Jonathan Galea, Manuel David Portas, Yhon Edisson Posada, Jefferson Vargas y Juan Carlos Víllora murieron al explotar un coche bomba al paso de su BMR por la aldea de Sahel al Derdara (El Líbano). Desgraciadamente el debate se centró sobre si el vehículo llevaba o no inhibidores, grave error.

Así quedó su BMR.

El inhibidor es una medida complementaria de la fundamental: el blindaje. Pero a nadie, entre el griterío generalizado, se le ocurrió preguntarse por qué razón un vehículo militar no soporta un ataque con coche bomba, como por otra parte ya hacen, tiempo ha, otros vehículos que entran y salen todo los días de ministerios y cancillerías próximas, el Sr. Aznar sabe de qué hablamos.

Un COUGAR tras un ataque con coche bomba. No hubo heridos tampoco.

De nuestro vehiculo VAMTAC (abajo) cabe decir aproximadamente lo mismo pero pese a que su blindaje es algo más moderno, eso no ha impedido que artefactos relativamente débiles hayan ya producido bajas propias. El paracaidista español Jorge Arnaldo Hernández murió en julio de 2006 al explotar bajo su vehículo VAMTAC una mina en la localidad de Bakua (Afganistán).


No deberíamos olvidar tampoco a siete miembros del CNI: Alberto Martínez, Carlos Baró, José Merino Olivera, José Carlos Rodríguez, José Lucas, Alfonso Vega Calvo y Luis Ignacio Zanón; muertos en 2003 al caer en una emboscada al sur de Bagdad mientras circulaban en vehículos Land Crusier sin blindaje alguno .

No sé cuantas bajas harán falta para que alguien se de cuenta que esto es una prioridad, que de momento es la principal amenaza y causa de muerte de nuestras tropas en el exterior y que por tanto se debe acometer la adquisición de nuevos vehículos de forma inmediata, nada de proyectos a medio plazo. Sé que esta campaña no es tan popular como otras, primero porque eso de proteger soldados no es muy progresista -con la guerra hay que acabar- y segundo porque los gastos en defensa no son populares entre los neoliberales -la economía no va bien-.

Pues bien, este observatorio no piensa cejar en el empeño. Y si el tiempo se encarga de ir cargando de razones lo aquí dicho -Dios no lo quiera, ya hay suficientes- , la campaña se recrudecerá no sólo contra los responsables de tanta negligencia e ineptitud en todos los estamentos, también contra los que guardan silencio complice.

¡MRAPs YA!

P.S: Mientras los nuestros se la juegan de mala manera ahora mismo, aquí lo único que importa es si tú dijiste que yo dije o si yo dije que tú dijiste, si tú eres más malo que yo falso, o yo más falso que tú irresponsable y por último, si subimos más tropas en el mercadeo de sangre y sudor para que el General Sanz presida el siempre dorado retiro, a la par que inoperante e institucional Comité Militar de la OTAN. Y si hay que hacer la ley a su medida, sin problemas, se enmienda para una persona y punto.

sábado, 15 de septiembre de 2007

La próxima guerra.

El Teniente General Wesley Clark apunta lecciones para la próxima guerra y no hay nunca que desperdiciar una lección gratis:

"One of the most important lessons from the wars in Iraq and Afghanistan -- and Vietnam, for that matter -- is that we need to safeguard our troops. The U.S. public is more likely to sour on a conflict when it sees the military losing blood, not treasure. So to keep up our staying power, our skill in hunting and killing our foes has to be matched by our care in concealing and protecting our troops. Three particularly obvious requirements are body armor, mine-resistant vehicles, and telescopic and night sights for every weapon. But these things are expensive for a military that has historically been enamored of big-ticket items such as fighter planes, ships and missiles. Many of us career officers understood these requirements after Vietnam, but we couldn't shift the Pentagon's priorities enough to save the lives of forces sent to Iraq years later."

Quizás también nosotros deberíamos priorizar según lo que necesitamos más para nuestra próxima guerra; si es que nuestra próxima guerra no está ya aquí, a lo cual ya llegaríamos tarde y mal.

Sustituciones ya.

El bueno del Tirador Solitario ha comenzado desde su apostadero una encuesta entre sus víctimas –entre las que me encuentro- acerca del mejor sustituto del BMR.

Me temo que será estéril el debate pero merece la pena hablar sobre ello. Incluso sería bueno que se orquestasen campañas blogosféricas, parecidas a las que proponen la prohibición de las bombas de racimo, para apoyar la sustitución inmediata con carácter prioritario de nuestros vehículos protagonistas de las misiones en el exterior. Quizás con suficiente presión se conseguiría acelerar algunos engranajes oxidados que deben tomar acción en el asunto.

Sí y no sólo el BMR, el VAMTAC blindado tampoco vale. Entiendo que la industria nacional de defensa es una de las piezas clave en nuestra seguridad (en lo tangible principalmente) pero desgraciadamente la experiencia no es buena. En esto el ET siempre ha tragado mientras la Armada y el EA han sabido poner –o simplemente defender razonadamente- sus prioridades operativas sobre la mesa. Cabe recordar lo que ocurrió cuando se intentó meter a frotamiento duro el BMR en nuestra Infantería de Marina o cuando a nuestro EA se le intentó colar el Tornado británico en vez del EF-18 por “afinidades políticas”. No coló.

Sin embargo al ET los condicionantes externos le han llevado al AMX30, al CETME L y más recientemente al Tigre y al Aníbal, ejemplos entre otros muchos de decisiones tomados sobre intereses ajenos a la operatividad y la disponibilidad. Y si al menos si fuésemos rápidos… pero ni eso.

En fin, este observador vota en la encuesta planteada por El Tirador por el vehículo que llegue más rápido, sin más condicionantes. Las prestaciones de los vehículos en el mercado son parecidas y están para mañana. No quiero ser demagogo pero la industria nacional de defensa no vale la vida de un solo soldado más, y si de verdad aquella quiere competir que espabile, el protectorado reinante sólo favorece la mediocridad.

Algunas ideas posibles, incluso ya evaluadas:

El Multi-Role Light Vehicle para sustituir al VAMTAC. El Ejército británico ya está en marcha. Y nosotros lo hemos evaluado (en la foto).



O el impresionante Mowag Eagle IV.

Quizás el Patria para sustituir al BMR.


Aunque lo más probable sea el Mowag IV (en el encabezado) por relaciones industriales estrechas.

jueves, 30 de agosto de 2007

La autocomplacencia, grave pecado.

Nuestro JEMAD se posiciona como candidato a la jefatura del Comité Militar de la OTAN. Las circunstancias le son bastante favorables fuera de España pero aquí dentro hay muchos que, desde todos los lados, le pondrán trabas y le escribirán cartas de des-recomendación.

Yo transcribo la mía, pues no es de ley advertir sobre los vicios ajenos sin recordar también lo dicho hace tiempo en este observatorio personal:

“Quizás los BMR que se estrenaron con honores en 1992 en la Guerra de Bosnia ya no valgan ni para éste ni para otros conflictos irregulares, por muchos inhibidores que les pongamos.
No vale de nada, Sr. Sanz Roldán, ponerles inhibidores a los camiones de patatas, no les hace ser menos camión de patatas y no dejan de estar desprotegidos sus ocupantes por ello.
Ese no es el camino, no están entre las virtudes a cultivar por un mílite la autocomplacencia y mucho menos la imprudencia, cosa que ha practicado al desvelar cuantos vehículos tienen o no inhibidores en una misión en curso.
Me pregunto cuantas patrullas en BMR ha hecho y en cuantas misiones ha participado en el exterior. Me temo que pocas. Graves irresponsabilidades…”.

Espero sinceramente que la prudencia y la no auto-complacencia guíen sus pasos en esta empresa, al menos un poco más de lo que lo han hecho hasta ahora. Aún así, con todo lo dicho, he de decir que cuenta con el apoyo de este observador pues tiene capacidades, experiencia y aplomo suficiente para el cargo.

Cartel que se lee a la salida de una base estadounidense en Irak.

***


Volviendo sobre el tema de los BMR y a propósito de alguna polémica blogera sobre el asunto me reafirmo en que la defensa activa de un vehículo es importante, pero ante la amenaza insurgente es secundaria. Los IEDs y las emboscadas relámpago son la primera amenaza de nuestras tropas en Afganistán y El Líbano (los hechos son indeformables en este sentido, sólo hace falta comprobar la lista de bajas recientes). Nuestro vehículo BMR está obsoleto en este asunto y en otros también. Y no somos capaces de sostener operaciones en las que se utilicen medios acorazados/mecanizados por falta, principalmente, de tripulaciones instruidas para hacer relevos.Pues bien, tendremos que pensar qué hacer. O instruimos a todo nuestro Ejército en PIZARROS (incluyendo a las fuerzas ligeras, es decir más de medio Ejército) o empezamos a plantearnos sustituir el vehículo que ha soportado todas las misiones hasta ahora (fuerzas ligeras y pesadas incluidas) como ya se había planeado hace más de diez años.

Para ejemplo un botón rescatado -como casi siempre- por El Tirador Solitario:

***



Un ejemplo de comportamiento de los que escasean últimamente. Nadie daba un duro por que Rosa Diez abandonara su acta de eurodiputada, pero lo va a hacer. Después de salvarle la cara al PSOE en las últimas europeas se va como lo que es, una política coherente y valiente. Si se une a Manuel Pimentel ya tiene mi voto.

lunes, 6 de agosto de 2007

Batallas olvidadas y guerras desinformadas.

Excelente reportaje el de Antonio Jiménez Barca titulado “La batalla invisible” sobre la batalla de Trafalgar. Ameno, preciso y muy bien enfocado. Quizás alguien debería tomar nota de algunas pinceladas que da, y remediar de una vez la invisibilidad de aquella batalla.
A mí, su lectura me ha hecho recordar que ninguna nación se libra de los zarpazos de la historia, pero que, probablemente, lo que diferencia a las grandes naciones de otras con menos suerte es que por muy salvaje que haya sido el zarpazo, tarde o temprano, se levantan y caminan. España sufrió este golpe -de la Pérfida Albión con Napoleón ejerciendo de mamporrero- y otros más graves –el más brutal nos lo dimos nosotros solos- y sin embargo aquí seguimos, caminando mejor que peor en el siglo XXI.
Con esto nadie debería concluir que podemos instalarnos en la despreocupación ni en el todo cabe porque tarde o temprano nos recuperaremos de cualquier vicisitud que suframos. La intrahistoria de generaciones enteras se convierte en pesadilla vivida a causa de hechos-a veces aparentemente insustanciales- que son iniciadores de tremendas trampas explosivas, y a veces éstas booby traps no sólo producen serias heridas, a veces conllevan graves amputaciones.



***


No puedo decir lo mismo del articulo “...Y todo sigue igual” de un tal Rubén Cabezas. No sé si es actual o si es ya antiguo y se ha incluido el enlace a propósito de una noticia de ayer, pero yo lo he descubierto hoy con cierta sorpresa. La verdad es que últimamente la calidad de las crónicas y artículos de El Mundo ha bajado bastante –ya hable de ello en “Los persas de ayer y de hoy”-; me imagino que se debe a una crisis estacional, o al menos eso espero.
En esta ocasión el artículo del Sr. Cabezas está lleno de imprecisiones y olvidos –cuando no errores- sobre varios asuntos. Me queda la duda de si los olvidos son intencionados para poder llegar a los juicios de valor a los que apunta o si son fruto del desconocimiento, lo que le lleva a conclusiones incorrectas; en todo caso, y desde mi punto de vista, su artículo no atina demasiado ni en lo objetivo ni en lo subjetivo.
Por mi parte sólo voy a intentar aclarar lo objetivo; a lo mejor, conocido los errores cometidos, el Sr. Cabezas llegaría a otras conclusiones distintas a las que plasma en sus análisis, o no. Vamos por partes:
1. En la Operación “Libertad Duradera”, que parece no gustar al autor, también participó España –decididamente y consensuadamente- con barcos, aviones, hospitales, terminales aéreas y otros apoyos quizás menos confesables. En concreto, desde noviembre de 2001 oficiales españoles trabajaron en el Centro de Coordinación de la Operación Libertad Duradera en Tampa (Florida), el Gobierno permitió la entrada de 38 buques en la base naval de Rota (Cádiz) y la escala en las bases de Morón (Sevilla) y Rota de más de 480 aeronaves; a petición del mando norteamericano, el Gobierno decidió el 11 de enero de 2002 añadir a la misión una Unidad Médica de Apoyo al Despliegue (UMAD) del Ejército del Aire en la base aérea de Bagram, 46 kilómetros al norte de Kabul; España también aportó medios aéreos a la coalición internacional, varios C-130 Hércules realizaron misiones de transporte de ayuda humanitaria y tres de estos aviones mantienen –a día de hoy- un destacamento en Manas (Kirguizistán) desde donde participan en el puente aéreo hacia Afganistán. El gobierno autorizó también, para su despliegue en el Océano Índico occidental, la participación de tres buques de la Armada -las fragatas Santa María y Numancia y el buque de aprovisionamiento Patiño- y un avión P-3 Orión de patrulla marítima. Por otra parte, una fragata española participó en la fuerza naval aliada que patrullaba en el Mediterráneo oriental. Fue por acuerdo del Consejo de Ministros de 2 de julio de 2004 como se decidió la finalización de la participación española en esta operación.

En la foto, el buque norcoreano So San siendo asaltado por Infantes de Marina españoles embarcados en la Fragata Navarra (F-85) y el buque Patiño (A-14) en el marco de la Operación Libertad Duradera. El buque tranportaba 15 cuerpos completos de misiles Scud, 15 cabezas de combate convencionales alto explosivo, así como 23 tulvas con ácido nítrico y alrededor de 85 bidones de productos químicos.
2. La operación ISAF no comenzó en el 2003 como afirma el autor. El 20 de diciembre de 2001, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas aprobó en su resolución 1386 el despliegue de una Fuerza Internacional en Afganistán con el objetivo de apoyar al recién instaurado Gobierno de Kabul y garantizar la estabilidad de la región. El Consejo de Ministros español aprobó el 27 de diciembre de 2001 la participación española en la misión y un mes más tarde llegó a Kabul el primer contingente español, constituido sobre la base de la Brigada de Cazadores de Montaña Aragón I, de Jaca (Huesca). Por tanto nuestra presencia en Afganistán estuvo, desde 2001 hasta 2004, encuadrada en dos misones distintas.
3. En la actualidad nuestro despliegue no se circunscribe a Herat como se afirma en al artículo, sino que España además de liderar la Base de Apoyo Avanzada y mantener una compañía como QRF (Quick Reaction Force) en Herat, aporta un Equipo de Reconstrucción Provincial (PRT) en Qala i Naw –el cual es el esfuerzo principal de nuestro país en la zona- y diverso personal, tanto en el Cuartel General del Mando Regional de Herat, como en el Cuartel General de ISAF en Kabul. En su reunión del 28 de septiembre de 2006 el Consejo Atlántico autorizó la expansión de ISAF hacia el Este, con efectividad del día 5 de octubre de 2006, con lo que, en la actualidad, todo el territorio de Afganistán se encuentra bajo el paraguas de esta operación.
Ya dije en ni entrada “¿Quiénes son?” que es premisa militar ineludible el conocer exactamente a tu enemigo antes de comenzar a combatir; y que aquí ya llevamos mucho retraso. Pues bien, análisis como el del Sr. Cabezas no contribuyen en absoluto a que nuestros ciudadanos entiendan en qué lucha estamos embarcados, ni siquiera facilita un somero conocimiento de lo que verdaderamente ocurre. No debería un periódico serio como es El Mundo ser tan tremendamente impreciso ni tan, en mi opinión, tendencioso en este asunto, aunque esto segundo es otra historia.
El día que EEUU invocó el artículo 5 del Tratado del Atlántico Norte y España, en solidaridad con el agredido, decidió apoyarle en su contraofensiva atacando Afganistán, se involucró en un combate del que, me temo, desconocíamos casi completamente su dinámica, sus motivaciones y sus intenciones. Desde luego son curiosas las afirmaciones de unos y otros al inicio de nuestra singladura en la Operación Libertad Duradera casi seis años después:
“El presidente del Gobierno, José María Aznar, confirmó anoche que unidades españolas «están ya cumpliendo las misiones que les han sido encomendadas» como miembros de la OTAN en el ataque contra Afganistán. El Presidente Aznar quiso transmitir a los ciudadanos españoles un mensaje de tranquilidad «en el sentido de que todas las medidas han sido adoptadas y de confianza en la seguridad de que el éxito culminará nuestros esfuerzos en la lucha contra el terrorismo». El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, respaldó los ataques estadounidenses y reprochó al Gobierno que no actúe con más agilidad ante lo que calificó como «una acción preventiva» contra el terrorismo internacional. Por el contrario, el coordinador general de IU afirmó que el ataque es «ilegítimo» porque «no responde al derecho internacional». A su juicio, «sólo servirá para provocar una espiral de odio».” EL MUNDO. 8 de octubre de 2001.
No hace falta comentario, todos –excepto alguno- nos embarcamos en aquella operación sin saber muy bien dónde nos llevaba, sin valorar detenidamente sus efectos.
Quizá, si lo hubiésemos valorado adecuadamente, hubiésemos llegado a la conclusión de que moralmente había que hacerlo en defensa de nuestras convicciones, pero nos habríamos ahorrado quizás seis años de paños calientes. Paños calientes que sin meditarlo mucho nos llevaron a Irak, a más Afagnistán y ahora nos han llevado a El Líbano. El simple -pero importante- hecho de apoyar al aliado agredido desencadenó el apoyo incondicional contra el nuevo enemigo babilonio; el simple - pero importante- hecho de contar con el sello de calidad de la ONU desencadenó un despliegue inmediato esta última vez en El Libano. Quizás volvimos a no valorar lo que hacíamos. Los efectos...
Cuando nuestros dirigentes –y los de otros países- dijeron y dicen que iban a luchar contra el ”terrorismo internacional” atacando Afganistán estaban cometiendo como mínimo un error de apreciación, nada tenía que ver esta vez la lucha contra ETA o las FARC, miembros por derecho del club “terrorismo internacional”, con el enemigo al que nos enfrentábamos. No iban a luchar contra tal entelequia, iban a luchar contra una organización extremista islamista que había tomado el poder en un país a través de una guerra subversiva vertical, que había perpetrado un ataque terrorista a la nación más poderosa del mundo “en justa venganza por haber profanado con sus infieles pies los Santos Lugares del Islam” muchos años atrás y que había conseguido formular la causa para hacer estallar la Yihad islamista global.
Éste era- y es- el adversario. Pero ahora seis años más poderoso, seis años más enquistado y seis años más sigiloso. Ese es el enemigo al que se intenta combatir en Afganistán, en Marruecos, en Argelia, en Yemen, en Madrid, en Londres...; porque esta lucha tiene y tendrá muchos frentes abiertos, y a cada uno de ellos habrá que aplicarles soluciones distintas; pero siempre dando buena y veraz cuenta a nuestros ciudadanos.

miércoles, 18 de julio de 2007

Lecciones aprendidas... por otros.

Carro de combate Centauro de nuestra Caballería
La derrota norteamericana en la Guerra de Vietnam supuso un cambio trascendental en la concienciación sobre la vital importancia que tiene la capacidad de cualquier ejército de sacar conclusiones en los conflictos tenidos, tanto propios como ajenos. Sólo un concienzudo trabajo de recopilación de virtudes y defectos, de aciertos y errores, de novedades, permite aprovechar en toda su extensión la experiencia vivida o conocida. La metódica recopilación de lecciones aprendidas es una de las grandes aportaciones del TRADOC del ejército norteamericano al arte militar ( su lema es "Victory starts here"). En nuestras FAS sólo existe algo similar en el seno del ET, se denomina MADOC (atentos a la diferencia entre sus webs) y la verdad es que empieza a dar los primeros pasos en este sentido trás más de 8 años de existencia.


Vehículo Piraña de nuestra Infantería de Marina en BiH 2005

Sobre el asunto de cuales son los vehículos más apropiados en estos conflictos asimetricos e irregulares en los que , cada vez más, nos veremos inmersos, hay innumerables lecciones aprendidas. Todas indican en la misma dirección; vehículos ágiles y muy protegidos.

Pero lo realmente crucial -siendo el vehículo un asunto importante- es el conjunto. La lucha irregular exige de una panoplia de medios, procedimientos y tácticas muy amplia. Cuanta más diversidad de medios mejor. Vehículos terrestres ágiles y protegidos operando con apoyo de helicópteros y francotiradores, una inteligencia brutal en su capacidad de adquirir y brutal en su capacidad de analizar, adiestramiento previo en COIN, vehículos aéreos y terrestres no tripulados, un sistema CIS interoperable, medios SIGINT desplegables, UOE,s instruyendo y contactando, coordinación estrecha cívico militar, interacción con los servicios de inteligencia... e incluso caben los carros de combate.

Pero la capacidad de este país- y de otros muchos- para proyectar y sostener -más importante esto segundo- una fuerza en el exterior es limitada. No se puede llevar todo lo que queremos, así que lo que se lleve debe ser lo más polivante posible. Y aunque lo pudiésemos llevar, no podríamos sostenerlo. Por lo bajini se puede oir -quién quiere escuchar- que la razón de no llevar VCI PIZARRO a El Líbano fue la incapacidad de hacer rotaciones en las tripulaciones. No hay que olvidar que ni legionarios, ni paracaidistas, ni aerotransportados, ni montañeros, ni ligeros, ni acorazados tienen Pizarros; sin embargo todos éstos y los mecanizados pizarreños han participado en misiones en el exterior con BMR,s. Además de que no disponen de estos medios para instruirse, la instrucción de tripulación de un VCI o un carro de combate moderno es tremenda. Es decir, la opción Pizarro era insostenible pensando -como parece lógico- que nuestra estancia en aquella zona no será corta. No hablemos de los LEOPARDOS, que ni siquiera se han podido juntar tripulaciones aún para un batallón en territorio nacional.

Por mi parte voy a aportar aquí parte de un trabajo de recopilación de lecciones aprendidas que realicé un tiempo atrás ciñéndome sólo a los asuntos que creo que pueden proyectar algo de luz sobre la complejidad de las operaciones realizadas en ambiente irregular y los medios y procedimientos que otros opinan como los más válidos. Mucho de este trabajo es copia resumida de las lecciones aprendidas del TRADOC estadounidense y otras son procedentes del éjercito británico, en ningún caso son de elaboración propia:

EEUU. GUERRAS INDIAS.
­ -La movilidad es fundamental. Es un arma característica del enemigo asimétrico, pero que la fuerza que le combate no puede desdeñar.
-La sorpresa es de suma importancia. Emplear fuerzas móviles montadas durante la noche para sorprender al enemigo al amanecer era la mejor manera de contrarrestar a los escurridizos indios.
­ -Conjuntamente con la clásica disciplina militar convencional, los soldados deben poseer confianza en sí mismos, individualidad y la misma rápida movilidad que el insurgente.

EEUU. FILIPINAS.
De su conflicto en las Islas Filipinas también anoto algunas lecciones aprendidas:
­ -Evitar misiones de búsqueda y destrucción ejecutadas por Grandes Unidades.
­ -Maximizar el empleo de exploradores locales y de fuerzas paramilitares para llevar el peso humano de un patrullaje muy descentralizado.
­ -Luchar encarnizadamente por ganarse el apoyo popular, mejorando la higiene y construyendo escuelas y hospitales.
­ -Realzar la legitimidad del régimen apoyado, forzándole a dar salida política a las corrientes que nutrían a la insurgencia.
­ -Aplicar tanto incentivos como castigos. Las Fuerzas americanas emplearon un patrullaje agresivo y una fuerza para perseguir y aplastar a los insurgentes, pero trató bien a los rebeldes que fueron capturados.

EEUU. VIETNAM.
En Vietnam se libraron dos conflictos; uno de guerra más convencional, con misiones de búsqueda y captura a gran escala y guerra de desgaste, pero también otro de contrainsurgencia y pacificación. De esta parte de la guerra se han obtenido interesantes lecciones:
­ -Durante gran parte de la guerra, las Fuerzas Especiales adiestraron y dirigieron a los Grupos de Defensa Irregular Civiles, integrados por tribus indígenas, con misiones de inteligencia y seguridad. Esto permitió un gran rendimiento de las fuerzas especiales (con sólo 2.500 americanos, organizaron un ejército de 50.000 combatientes). También organizaron las fuerzas móviles guerrilleras, con personal indígena dirigido por americanos, para ejecutar incursiones en las bases enemigas, y hostigamiento a sus unidades regulares utilizando tácticas guerrilleras.
­ -El Programa de Acción Combinada del Cuerpo de Marines fue otra iniciativa que mejoró significativamente la capacidad de asegurar la población y obtener información. En dicho programa, cada escuadra de fusileros del Cuerpo apoyaba a una sección compuesta por indígenas de una localidad. Estas secciones combinadas se adiestraban, patrullaban, defendían y vivían en la aldea de la que eran naturales los indígenas. Entre sus misiones figuraban destruir las infraestructuras del Vietcong en la localidad, proporcionar seguridad y orden público, proteger la infraestructura propia, las bases y las vías de comunicación de la aldea, organizar redes de inteligencia, participar en acciones de apoyo a la población civil y llevar a cabo propaganda en contra del Vietcong. De esta forma, una modesta inversión en fuerzas estadounidenses a nivel de las aldeas producía grandes beneficios en seguridad e inteligencia.

Evaluación del piraña III H 8X8 por parte de nuestra Infantería de Marina

EEUU. SOMALIA.
La “derrota” estadounidense tuvo lugar en el marco de una operación de imposición de la paz liderada por Naciones Unidas. Un relativo fracaso táctico dio al traste con la participación norteamericana en la misión, y a medio plazo disuadió al Gobierno de los Estados Unidos de embarcarse en aventuras militares no lideradas por ellos mismos. Es un conflicto paradigmático pues se asemeja mucho a una hipotética situación en la que se pueda ver envuelta España (¿Líbano?) durante la ejecución de un misión no bélica que se tuerza. Conclusiones que extrajeron del conflicto:
Respecto al mando y control:
­ -ONUSOM II no se estructuró sobre consideraciones militares, sino que se compuso de remanentes dispares de fuerzas de ONUSOM I y UNITAF. La línea de mando no era clara, lo que condujo a diferentes interpretaciones sobre el mandato, que variaron desde un repliegue a posiciones defensivas hasta negociaciones secretas con algunas fracciones somalíes, enturbiando la necesaria imparcialidad y neutralidad de las fuerzas de la ONU.
­ -El uso de niveles intermedios de mando y la división en sectores muy autónomos ayudó a aliviar los problemas de control en el teatro de operaciones en acciones de ayuda humanitaria debido a los problemas que generaban contingentes procedentes de 33 nacionalidades distintas. Sin embargo esta descentralización fue fatal cuando la operación adquirió un mayor grado de conflictividad.
­ -El propósito del mando era vago. La resolución que estableció la misión no definía con claridad los objetivos a conseguir, y se basaba en un análisis de la situación alejado de la realidad. El esquema de maniobra que seguían las fuerzas se reducía a un sinnúmero de acciones tácticas como reacción a la actitud de las partes en conflicto. El representante especial del Secretario General que debía ejercer un papel coordinador fundamental cambió cinco veces en tres años.
­ -La excesiva multinacionalidad provocó graves problemas de interoperabilidad en medios y procedimientos y gran disparidad en el grado de adiestramiento.
Respecto a inteligencia:
­ -Se cometieron errores en la identificación de los líderes en Somalia y la autoridad de que disponían.
­ -El conocimiento sobre el ambiente local era muy escaso en general en todos los niveles de mando.
Respecto a cooperación cívico-militar:
­ -Las reglas de enfrentamiento (ROE,s) deben restringir lo menos posible las capacidades de la unidades de combate en las misiones de imposición de la paz.
­ -La coordinación e integración de las agencias civiles humanitarias y otras organizaciones internacionales involucradas es esencial.
Respecto a maniobra:
­ Se comprobó la eficacia de la maniobra aeroterrestre que combinaba vehículos ligeros y helicópteros multipropósito. Sin embargo, echaron en falta el adiestramiento previo en su coordinación.
­ Como resultado de la experiencia vivida en Mogadiscio, las Fuerzas Armadas de los EE.UU. adoptaron numerosos proyectos de mejora de Operaciones Militares en Terrenos Urbanos (MOUT). Ejemplo de ello es el proyecto «Metrópolis», orientado a la búsqueda de nuevas tácticas de combate en localidades, vehículos ligeros con mayor potencia de fuego y protección, construcción de centros de adiestramiento para el combate en zonas urbanizadas, desarrollo de equipo individual del combatiente implementando los últimos avances tecnológicos y finalmente intensificar el adiestramiento y la instrucción como mejores medios de prepararse para el combate urbano.
Respecto a CIS:
­ -Necesidad de hacer ínteroperables los sistemas de telecomunicaciones, que no permitieron el enlace, ni siquiera dentro de las fuerzas del mismo país.
­ -Necesidad de homogeneizar los sistemas informáticos de apoyo al mando y control.
En resumen, se vio la necesidad de adiestrar fuerzas especializadas en combate urbano en ambiente de operaciones no bélicas, con mayor protección y potencia de fuego sin renunciar a una gran movilidad y capacidad de observación, dotadas de nuevos medios de adquisición aptos para dicho terreno, con medios de telecomunicación fiables, dotadas de medios de control de masas, con capacidad para llevar a cabo acciones PSYOPS, capaces de detectar orígenes de fuego indirecto o de francotiradores, con medios aéreos que monten contramedidas ante todo el espectro de amenazas y perfectamente coordinados con tierra, que emplee vehículos no tripulados y con capacidad de combate todo tiempo.


GRAN BRETAÑA-IRLANDA DEL NORTE.
­ -Entre 1969 y 1976 el Ejército tenía prioridad en las operaciones de seguridad, con el apoyo de la policía. Las misiones policiales de las fuerzas militares presentaron serios problemas: falta de autoridad legal para practicar detenciones en las calles, errores procedimentales por falta de instrucción e incluso la persecución judicial a los soldados por tribunales civiles.
­ -Se utilizaron patrullas montadas y a pie. Éstas cumplían mejor los objetivos del patrullaje, pero aquéllas proporcionaban mayor seguridad.
­ -Se prefirió utilizar vehículos rueda que cadenas. Aparte del mayor costo, del ruido y de los destrozos que éstos provocan, se consideró que evocaban a los carros soviéticos sobre Praga.
­ -Una instrucción especializada mejora mucho la efectividad. Hasta 1972 las unidades no recibieron instrucción específica para su misión. Ese año se crearon los Equipos de Apoyo a la Instrucción para Irlanda del Norte (NITAT), el primer paso del ejército para asumir la misión a largo plazo. Esta instrucción incluía procedimientos de patrulla urbana, de control de aglomeraciones, tiro sobre objetivos en movimiento, primeros auxilios, capacidades y normas para proceder a un arresto, reglas de enfrentamiento, descripción de las tácticas, organización y capacidades del IRA y de los paramilitares protestantes, y empleo de los equipos de seguridad. La instrucción se apoyaba en campos de entrenamiento en zonas urbanizadas.
­ -La inteligencia humana fue más importante que la técnica y la responsabilidad de la obtención recayó en los niveles de batallón y compañía. Las secciones de inteligencia de los batallones pasaron de tener 5 ó 6 hombres a más de 30.
­ -Se aligeró al máximo el equipamiento. El tipo de actividad que desarrollaban se veía dificultado con un equipo completo, pesado y engorroso, por lo que progresivamente fueron aligerándolo. Algunos batallones llegaron incluso a equipar a algunos hombres con ropa de deporte para perseguir a alborotadores que trataban de huir.
­ -Gran importancia de los jefes de pelotón. El constante contacto con la ciudadanía y la necesidad de tomar decisiones instantáneas sobre el terreno acrecentó el peso específico de los suboficiales jóvenes.
­ Amplio uso de helicópteros. La Fuerza aérea mantenía en zona dos escuadrones de helicópteros de transporte. Llevaron a cabo fundamentalmente misiones de reconocimiento, reserva aeromóvil, abastecimiento de destacamentos aislados, evacuación sanitaria y transporte de autoridades.
­ -Amplio empleo de francotiradores. Se utilizaron profusamente, aunque se demostraron mucho más eficaces en campo abierto que en zonas urbanizadas.
­ -Se emplearon profusamente armas no letales. A pesar de no estar diseñadas para matar, se calcula que cada 18.000 disparos de balas de goma se provocaba una muerte. Se utilizaron también gases lacrimógenos, cañones de agua y tinte para marcar a los cabecillas de los alborotos.

CHECHENIA. COMBATES EN GROZNY.
De la invasión rusa de Chechenia en 1994 podemos aprender algunas lecciones:
­ -La necesidad de distinguir claramente combatientes de no combatientes. Esto cobra vital importancia, ya que permanece en la ciudad una mayor proporción de población civil no combatiente que en un conflicto convencional.
­ -Disposición permanente de reservas. El combate urbano tiene un ritmo de progresión muy lento, y para mantener su impulso es necesario disponer constantemente de reservas. Además permiten rotar a las fuerzas que ejecutan los esfuerzos principales y dotan de libertad de acción.
­ -Instrucción individual especializada. Los guerrilleros defendían los edificios desde las plantas centrales, cediendo a los rusos el suelo y los tejados. Prepararon el terreno de forma que les permitía acceder de un edificio a otro, plagando el terreno abandonado de trampas explosivas, apoyadas por francotiradores con fusiles de precisión y lanzagranadas.
­ -Se vió la necesidad de nuevos procedimientos de empleo de los vehículos blindados. Rusia perdió en los combates 20 carros, más de 100 BMP,s y algunos ZSU-23, en parte por mal uso, como por emplearlos aisladamente o por resistirse a combatir con la infantería desembarcada, y en parte por el acierto de los chechenos, que aprovecharon las limitaciones técnicas de este material ruso en los campos de tiro cortos.
­ -Eficacia de armas no convencionales. Como gases irritantes/tranquilizantes, lanzallamas o armas no letales como las termobáricas, aunque no estaban disponibles en cantidad.
De la pérdida de Grozny a manos de los chechenos podemos aprender:
­ -Control y seguridad. Una ciudad rebelde debe ser puesta bajo control militar, incluyendo todos los aspectos. Además, una ciudad tan intrincada como Grozny, para asegurar su control requiere unas fuertes reservas que incluyan helicópteros y fuerzas ligeras a pie especialistas en el combate urbano.

LA GUERRA DE AFGANISTÁN. OPERACIÓN LIBERTAD DURADERA.
Afganistán es un escenario muy específico y tan lleno de peculiaridades que dificulta la obtención de lecciones aplicables a futuros conflictos. En la medida que refleja una tendencia, la especificidad de Afganistán puede relativizarse.
Sea como fuere, el conflicto de Afganistán aporta las siguientes enseñanzas:
­ -No se vence sólo con tecnología e inteligencia. Los tres elementos principales de la revolución de los asuntos militares (nuevos medios de obtención, CIS y armas inteligentes) se han desarrollado y utilizado de forma espectacular. Sin embargo, la superioridad técnica en este campo se queda escasa ante este enemigo elusivo, especialmente en montañas y ciudades.
­ -Bondad de la utilización de fuerzas terrestres actuando en apoyo. Fundamentalmente unidades de operaciones especiales en tres vertientes: para iluminar blancos a la aviación, colaborando en el control del espacio aéreo y como instructores y asesores de las guerrillas opositoras al régimen talibán.
­ -Importancia de contar con servicios de inteligencia muy activos. Los actores naturales del país no presentan lealtades firmes, sino que sus alianzas son muy volátiles y son vulnerables a la acción del dinero. Por ello, las unidades de combate deben compartir escenario con los servicios de inteligencia que tratarán de obtener apoyos y alianzas que pueden evitar esfuerzos a las fuerzas convencionales.
­ -El conflicto asimétrico está, por definición, inacabado. Las victorias son más fáciles de conseguir pero menos definitivas. Se logró la caída del régimen talibán, pero la actividad de los grupos de resistencia al gobierno y a las fuerzas norteamericanas continúa sin visos de ser controlada a corto plazo. El esfuerzo de las unidades se tiene que centrar tanto en las operaciones principales como en una larga posguerra.
­ -La información pública se debe mantener en equilibrio. El combate en un lugar tan recóndito y hostil a la prensa extranjera evitó el habitual seguimiento informativo de los medios de comunicación social occidentales, lo que aumentó la libertad de acción en este campo. Sin embargo, la falta de noticias propias benefició la campaña de información pública del adversario.
­ -Importancia del empleo de vehículos aéreos y terrestres no tripulados en niveles cada vez más bajos. Se ha evidenciado la utilidad de estos medios; los UAV,s. en combinación con satélites para la obtención de información a nivel operacional y los robots terrestres y UAV,s tácticos para la protección de la fuerza y apoyo a las operaciones en el terreno. Los Estados Unidos ya han incluido aumentos en su presupuesto para este sector; el aumento de información recibida obliga a realizar un gran esfuerzo en medios CIS y en células de análisis y gestión en la inteligencia militar táctica.
­ -Las acciones rápidas y decisivas implican movilidad estratégica y táctica sin olvidar la seguridad de las tropas; ligereza en los materiales y protección de la fuerza es la fórmula mágica. Implica la necesidad de contar con fuerzas capaces de actuar con escaso preaviso, en cualquier parte del mundo, y con la capacidad de resultar decisivas. Esto es, que no dependan orgánicamente de otras unidades, ni tengan una logística impracticable para un despliegue rápido. El hecho de que los Marines hayan sido la fuerza estrella en Afganistán se ha debido al empeño que sus responsables han puesto en la última década para configurar el cuerpo de Marines en módulos de combate, autosuficientes en sus apoyos aéreos y de fuego y con un sostenimiento propio para 30 días de operaciones, algo que ninguna unidad, por ligera que sea, del US Army ha logrado aún. La USAF también se está configurando con este tipo de paquetes de acción independientes.

Por lo visto parece comúnmente aceptado que lo ideal -aunque no es fácil conseguirlo- es el uso de medios de perfil intermedio de gran movilidad y adecuada protección, pasiva y activa. El BMR ha sido un magnífico medio durante años- incluso envidiado por otros países- pero es hora -ya fue hace tiempo- del relevo. Y yo me pregunto: ¿Dónde están las famosas unidades medias que la Revisión Estratégica de la Defensa de 2003 preconizó? ¿Dónde está la Fuerza de Reacción Rápida que se creaba en la Directiva de Defensa Nacional 2004 y que se basaba en el ámbito terrestre en las fuerzas medias? ¿Es que acaso no se cumplen las directivas políticas?

"Criterio básico número 12 de la RED: Para ello, además de disponer de unas fuerzas ligeras, con adecuado grado de protección, se puede analizar la necesidad de disponer de fuerzas medias. Éstas, sin llegar a estar dotadas de la potencia de combate de las unidades acorazadas/mecanizadas, disponen de la suficiente capacidad resolutiva y de reacción rápida (proyectabilidad) que les permite ser adecuadas para controlar crisis emergentes donde no sea necesario empeñar la fuerza decisiva pero sí mantener la superioridaddesde el primer momento, además de situarse con rapidezen el escenario de la crisis."
"Directriz nº3 de la política de defensa en el ámbito nacional de la DDN 2004: Crear una Fuerza Conjunta de Reacción Rápida, constituida por unidades con alto grado de disponibilidad y adiestramiento, capaz de constituirse en un periodo breve de tiempo para misiones de contingencia bajo el Mando de Operaciones de las Fuerzas Armadas."

Pero además, leyendo detenidamente las lecciones aprendidas por otros, a mí se me ocurren unas cuantas debilidades en el conjunto, y es que "el conjunto" es muy amplio:

¿Están claros los objetivos políticos cuando se emprende una misión?

¿Son claros los mandatos recibidos de las organizaciones internacionales?

¿Están coordinados esfuerzos militares y civiles en las zonas de operaciones?

¿Tenemos capacidad de proyección y sostenimiento de fuerzas mecanizadas o acorazadas?

¿Están nuestras tropas adiestradas en COIN?

¿Tenemos polígonos urbanos de instrucción suficientes?

¿Tenemos medios CIS interoperables y en cantidad suficiente?

¿Tenemos medios EW (SIGINT, ELINT y COMINT) suficientes?

¿Nuetros servicio de inteligencia opera con nosotros -no protegido por nosotros- en las zonas de operaciones?

¿Tenemos vehículos aéreos y terrestres no tripulados?

¿Tenemos personal HUMINT suficiente?¿Hay secciones -o capacidad alguna-de inteligencia en los batallones?

¿Tenemos analistas de INT táctica suficientes? ¿Tenemos?

¿Tenemos personal formado suficiente para rotar en el uso de medios AC/MZ?

¿Es nuestro equipo cada vez más ligero?

¿Tenemos medios de visión nocturna suficientes?

¿Tenemos francotiradores instruidos?

¿Llevamos helicópteros a las misiones en apoyo a nuestras tropas?

Donde los tenemos ¿están instruidos en acciones aeroterrestres?

¿Estamos utilizando a nuestras OE,s en misiones de aistencia o formación? ¿O de guardaespaldas?

¿El Ejército del Aire permite que nuestras UOE,s terrestres iluminen blancos?

¿Tenemos armas no letales y suficientes medios de control de masas?

¿Tenemos leyes y SOFA,s que nos respalden como agentes de la autoridad para realiazar misiones policiales?

¿Tenemos ROE,s claras y precisas?

.....

...

..

Evidentemente lo más importante no es el vehículo; es el conjunto lo que de verdad marca la diferencia, aunque desgraciadamente, en los niveles en los que nos movemos nosotros, sería un consuelo tenerlo bueno.

Nuestra Infantería de Marina y nuestra Caballería ya están, hace tiempo, en el buen camino. ¡Lástima que las operaciones las sostenga la Infantería!