La capacidades militares futuras (POCAM).

Unos matices sobre el asunto de la propuesta de objetivo de capacidades militares que ayer se trató y comentó en éste y otros observatorios:

-La propuesta de objetivo de capacidades militares (POCAM) es fruto del nuevo proceso de planeamiento de la defensa nacional aprobado por OM. 37/2005. En realidad es la culminación del planeamiento que se inicia con la Directiva de Defensa Nacional que emite el Presiente del Gobierno cada cuatro años y que intenta responder con un planeamiento detallado (qué es necesario, por qué, para qué y cómo se va a adquirir) a lo que aquel ha ordenado. Se revisa de manera bianual para evaluar su cumplimiento y se modifica si es necesario en todo aquello que sea sobrevenido a lo planeado. Contiene objetivos a largo plazo (15-20 años), medio plazo (6 años) y corto (3 años).

-No hay que confundir con la Revisión Estratégica de la Defensa, documento que no tiene carácter legislativo y que es lo más parecido en España –aunque aún alejado- a una Estrategia de Seguridad Nacional. La RED es un documento de mayor calado que pretende describir los intereses de la nación, riesgos que se identifican y los modos y medios en los que se van a proteger los primeros. Como ejemplo, creo que clarificador, podemos usar el que la RED dice identicar un riesgo en que:

“Por las aguas del Estrecho de Gibraltar discurren las principales líneas de comunicación por las que fluyen los recursos básicos, sobre todo energéticos, para nuestro país. La concentración geográfica de estas rutas comerciales las
convierte inexorablemente en vulnerables, de ahí que una interrupción de las mismas tenga que considerarse un riesgo
potencial muy serio, tanto por la facilidad para ejecutar dicha interrupción, como por las repercusiones de dicha acción.”

y que a ello, nuestros militares contestan que necesitan fragatas y cazas capaces de mantener la superioridad naval y aérea local.

-Se infiere de lo dicho que estamos en diferentes niveles, político-estratégico el de la RED, y estratégico militar el de las capacidades. Es verdad que en la RED se incluyen aspectos concretos del desarrollo de la defensa, pero no hay que olvidar que gran parte de la propia revisión no fue consensuada entre los dos grandes partidos -sólo la primera más general lo fue-. Podemos entender que la parte de los anejos ha quedado totalmente obsoleta al cambiar de signo el gobierno de la nación, al ser emitida la nueva Directiva de Defensa Nacional de 2004 y al cambiarse el procedimiento de fijar las necesidades y capacidades militares con la OM arriba mencionada.

-En realidad la RED –al igual que anteriormente ocurrió con el libro blanco de la defensa- está tocada de muerte hace tiempo sin que se haya ordenado su entierro. Y es que como reflexión legalmente no vinculante que es, no hace falta derogarla. Es evidente que lo venga a sustituirla tendrá muchos elementos comunes con ella ya que se propone e inspira desde la DIGENPOL, donde el peso de lo político es más estrecho y por tanto la continuidad en los criterios básicos es más probable.

-Por tanto la importancia del documento que el Ministro de Defensa va a elevar a nuestro Presidente, reside en que en él se definen las capacidades (aviones de transporte estratégico, capacidad ISTAR no tripulada, buques de proyección estratégica…) que se quieren adquirir, mejorar y mantener para los próximos 15-20 años –más difusos-, 6 años –concretos- y 3 años –detallados a la peseta-.

Tres reflexiones al hilo del asunto como conclusión:

1. Si entre estas capacidades a mejorar no se ha detectado y propuesto la necesidad de reemplazar nuestros vehículos protagonistas de las misiones en el exterior –BMR y VAMTAC- por otros más acordes a las amenazas sobre el terreno, es que no está previsto de momento su adquisición.

2. Cabe la posibilidad de que esta necesidad haya sido identificada pero trasladada a los programas I+D desarrollados en el ámbito de la industria nacional con otros pecunios. Lo cual no sería tampoco tranquilizador porque eternizaría el proceso de adquisición.

3. El comunicado de Defensa es tan difuso y propagandístico que realmente deja abierta la puerta a que todo es posible. Debería ser infinitamente más precisa la manera en la que se informa a los ciudadanos de cómo se van a gastar sus dineros. Cuanta cultura democrática nos falta por adquirir.