Programa de defensa de UPyD.

El programa de defensa de Unión Progreso y Democracia. En resumen: aumento de gasto de defensa, se entiende que una nueva ley de la carrera militar, retribuciones más altas y vuelta a las compensaciones sociales, retribuciones de la guardias, derecho de asociación y democratización de los Consejos Asesores, integración de la Justicia Militar en la Ordinaria.

Literalmente:

DIAGNÓSTICO

1 - La supresión del servicio militar obligatorio fue recibida con general satisfacción, pero este cambio exige unas Fuerzas Armadas profesionales capaces de cumplir adecuadamente las misiones que se les encomiendan, como la cada vez más habitual participación en misiones internacionales de pacificación. Además, las condiciones profesionales y salariales de los militares están lejos de respetar los principios de igualdad que defiende UPyD.

2 - No es posible tener unas Fuerzas Armadas realmente profesionales con retribuciones muy por debajo de las que reciben niveles correspondientes en la administración, ni es posible tampoco tener el número de soldados y marineros profesionales (tropa y marinería) necesarios con los escasos atractivos que a día de hoy ofrece la carrera de soldado profesional.

3 - En resumen, la política de defensa de los últimos gobiernos también se ha visto afectada por la distancia entre los objetivos proclamados y la financiación totalmente insuficiente que se les dedica. La cicatería en las inversiones públicas que afecta a la educación, la atención sanitaria o leyes sociales como la de Dependencia, también afecta a la política de defensa. Los medios materiales con que cuentan los militares españoles no son comparables a los de otros ejércitos de la OTAN con los que deben compartir misiones internacionales en condiciones inferiores, lo que explica el alto nivel de accidentes mortales registrados por nuestra tropas en Afganistán, Líbano y otro lugares, e incluso en los desplazamientos, como el terrible accidente del avión Yak 42 en que murieron 62 militares en Turquía, el año 2003.

4 - En España, la tradicional insuficiencia de las inversiones en materia de defensa ha sido fácil de justificar porque está muy extendido el prejuicio que vincula Fuerzas Armadas a autoritarismo y dictadura, porque la opinión pública es muy sensible a los argumentos pacifistas y, en general, está muy mal informada sobre cuestiones militares o de defensa, déficit relacionado a su vez con el escaso interés por la política internacional. Es importante conseguir un mayor interés de los ciudadanos por la situación mundial en una época no sólo muy conflictiva, sino en la que es totalmente imposible permanecer al margen de los problemas y compromisos internacionales. Una sociedad con el grado de desarrollo de la española no puede seguir confiando su seguridad a conceptos como la Alianza de Civilizaciones, cortina de humo que esconde amenazas muy reales, como el auge del fundamentalismo islámico, el enconamiento de los conflictos de Oriente Medio o la debilidad internacional de la Unión Europea y, sobre todo, de la propia España. Debilidad que, en buena parte, es una consecuencia de la delegación de la responsabilidad de la defensa militar en terceros países, particularmente en los Estados Unidos.

5 - UPyD no es partidario del militarismo ni de las carreras de armamentos, y apoya la resolución de conflictos internacionales por medios pacíficos siempre que sea posible, pero por eso mismo entendemos la importancia de contar con unas Fuerzas Armadas profesionales competentes, bien dotadas de medios, bien retribuidas y con los derechos constitucionales de sus miembros bien protegidos. Conseguir este objetivo elemental exige un aumento neto del gasto en defensa en una doble dirección: dotar de medios adecuados a las Fuerzas Armadas, y homologar las retribuciones de sus profesionales con las de los funcionarios y técnicos de la administración.

6.- La eficacia operativa de las Unidades de las Fuerzas Armadas exige el constante rejuvenecimiento de sus integrantes, que deben tener plena capacidad física. Esto implica su pronto licenciamiento y la necesidad de prever su reincorporación a la sociedad civil. Es preciso ofrecer un modelo de carrera atractivo a la tropa profesional, formándola durante su estancia en las Fuerzas Armadas de tal modo que permita la convalidación de sus estudios y su reintegración en la sociedad civil.

7.- Tradicionalmente, la exigencia de disponibilidad permanente de los miembros de las Fuerzas Armadas, así como su sujeción a la movilidad geográfica necesaria para completar en todo momento las plantillas de las unidades y mantener su eficacia operativa, se compensaba con prestaciones sociales que paliaban su sacrificio económico y familiar. Un mal entendimiento de la igualdad funcionarial llevó a la eliminación de lo que fue presentado, erróneamente, como “privilegios”: viviendas militares, economatos, centros escolares, etc., que permitían una mínima adaptación personal y familiar a los múltiples traslados por cambio de destino y el desarraigo consiguiente. Es necesario reconsiderar las situaciones especiales creadas por la profesión militar, como los numerosos desplazamientos y cambios de residencia que afectan a las familias.

PROPUESTAS

1 – Aumento progresivo del gasto en defensa para conseguir:

a) – La homologación de las retribuciones de los profesionales de las Fuerzas Armadas con los de técnicos comparables de la Función Pública del Estado. Retribución justa de las guardias y de las horas y los servicios extraordinarios, así como de los prestados en misiones de colaboración en la seguridad ciudadana y antiterrorista. Esta mejora económica debe complementarse con medidas de mejora de la calidad de vida de los miembros de las Fuerzas Armadas y sus familias, mediante un diseño adecuado de la jornada laboral, los permisos, licencias, vivienda, centros de enseñanza, destinos por consorte, situaciones de desplazamiento por maniobras y a misiones internacionales, así como de núcleos de vida dentro de las bases o acuartelamientos, pero perfectamente separados, a fin de que la actividad militar no se vea interferida por la vida personal fuera de servicio.

b) – La dotación adecuada de equipos y medios materiales para que las Fuerzas Armadas puedan desempeñar adecuadamente, en buenas condiciones de seguridad, las misiones que se les encomiendan, cumpliendo los estándares exigidos por la OTAN.

c) – La conversión de los puestos de soldados y marineros profesionales en ocupaciones atractivas y laboralmente dignas, orientada a la articulación, por Ley Orgánica, de una carrera profesional militar completa, integrada y definitiva.

d) - Formar a la tropa profesional durante su estancia en las Fuerzas Armadas, de tal modo que permita el desarrollo de sus funciones técnicas y al mismo tiempo permita la convalidación o el reconocimiento de sus estudios por los de FP del ministerio correspondiente, garantizando su plena reinserción labora en la vida civil.

2 – Regulación del derecho de asociación para los profesionales de las Fuerzas Armadas, y democratización de los consejos asesores de personal. Así mismo, regulación del régimen de derechos y deberes específicos de los miembros de las Fuerzas Armadas. Homologación del Código Penal Militar con el Código Penal en aquellos artículos y procedimientos que puedan implicar discriminación injustificada o menoscabo de los derechos constitucionales. Revisión del régimen disciplinario militar y de las Reales Ordenanzas en el mismo sentido. Justicia militar integrada en el Poder Judicial, tanto los jueces y magistrados como sus tribunales. Asesoría jurídica independiente para los miembros de las Fuerzas Armadas, principalmente para las clases de tropa.