El programa de defensa de Falange Española.

El programa exterior y de defensa de la Falange Española. En resumen: abandono de todas las misiones exteriores, adopción del principio de no intervención, ruptura con la OTAN, rechazo a la alianza de Civilizaciones, acuerdos bilaterales con naciones europeas, establecer una alianza militar con Argentina y hacer frente común frente al Reino Unido en los asuntos de Gibraltar y las Malvinas, fin de la presencia militar estadounidense en España, 0´7% para cooperación con el el sur, cambio de rumbo en política bilateral con Marruecos, reconocimiento inmediato de la República Árabe Saharaui Democrática, refuerzo de territorios en el norte de África e impulso decidido a la Hispanidad.

Literalmente:

LA FALANGE (FE) propone una vuelta de España a los ejes tradicionales de su política exterior: recuperación de Gibraltar, unidad política de las naciones hispanas, firmeza frente a Marruecos y tratados bilaterales de defensa en Europa. Estas líneas políticas deben verse complementadas por la indudable presencia española en aquellos programas de cooperación o desarrollo que tiendan a la elevación del nivel de vida de estos países.

LA FALANGE (FE) propone una EFECTIVA RECUPERACIÓN DE LA INDEPENDENCIA NACIONAL EN POLÍTICA EXTERIOR, mediante la adopción de medidas políticas conducentes a la determinación de una política internacional verdaderamente soberana. A estos efectos, los falangistas propugnamos, como primera medida fácilmente practicable, la RETIRADA INCONDICIONAL DE NUESTRO EJÉRCITO de todas las zonas de conflicto en las que se halla desplegado en un plazo no superior a tres meses: en especial, de Afghanistán y del Líbano, revisando, en líneas generales, el contenido y coste del resto de Misiones de Paz en las que esté participando España. Ni un soldado español más debe morir por causa de una política internacional seguidista y cobarde. Propugnamos una revisión de la legislación vigente, en el sentido de extremar las formalidades legales que permitan el envío de tropas a misiones fuera del territorio nacional, partiendo de la base del principio general de NO INTERVENCIÓN.

LA FALANGE (FE) se pronuncia decididamente por la revisión de los tratados militares con ESTADOS UNIDOS: en especial, con aquellos que supongan una utilización conjunta de instalaciones militares: expresa extinción de derecho de paso y repostaje de aviones norteamericanos en misiones de combate o inteligencia militar. Replanteamiento de nuestras relaciones militares con USA y redacción de un nuevo tratado bilateral de defensa. Salida de las instalaciones militares norteamericanas de nuestro más en territorio español.

LA FALANGE (FE) propugna la ruptura del Tratado de la OTAN por parte de España. Entendemos que, desaparecido el peligro de ataque comunista, ha perdido su finalidad meramente defensiva, convirtiéndose en la punta de lanza de operaciones militares agresivas, todavía poco explicadas a la opinión pública. Esta salida se podría hacer en dos etapas bien diferenciadas: primero, mediante una SALIDA DE BASES E INSTALACIONES DE LA OTAN de suelo español y, posteriormente, extinción de vínculos operativos conjuntos. La defensa de España en Europa debe replantearse por medio de tratados bilaterales con las naciones aliadas. En consecuencia, manifestamos nuestro expreso rechazo al establecimiento en la ciudad de Zaragoza de la base principal del Sistema de Vigilancia Terrestre de la OTAN.

LA FALANGE (FE) propone una ofensiva diplomática y económica inmediata para la recuperación del PEÑÓN DE GIBRALTAR, demostrando firmeza frente al Reino Unido en esta cuestión trascendental de nuestra política exterior. Los falangistas proponemos el cierre inmediato de la verja, así como el establecimiento de medidas de bloqueo económico de este enclave: prohibición de tránsito por territorio nacional de personas y mercancías, cierre financiero de cualquier operación económica de fin o destino en Gibraltar y negación de permiso de utilización de nuestro espacio aéreo para los aviones con destino a la Roca. Realización de maniobras militares periódicas en el área gibraltareña, como instrumento de presión militar sobre la Roca. Rechazamos expresamente cualquier carácter vinculante para España de un eventual reférendum en territorio de Gibraltar: España garantiza a la población gibraltareña la adquisición automática de la nacionalidad española para todos aquellos gibraltareños que lo soliciten. Para el resto, se garantiza el derecho de salida de nuestro territorio nacional con el tiempo suficiente para organizar adecuadamente esta marcha desde el punto de vista personal o económico. Asimismo, los falangistas proponemos un tratado de alianza política y militar con Argentina, al objeto de tratar de manera conjunta el problema de Gibraltar y el de las ISLAS MALVINAS, ofreciendo frente al Reino Unido un frente conjunto y unitario de carácter político, diplomático y militar en orden a la recuperación definitiva de estos territorios coloniales.

LA FALANGE (FE) propugna una defensa a ultranza de la españolidad de CEUTA, MELILLA Y DE LOS ENCLAVES NORTEAFRICANOS, reforzando la presencia militar española en estos puntos de nuestro territorio nacional. Política de dureza económica y militar frente a Marruecos, siempre y cuando no sea posible articular un esquema común de relaciones recíprocas estable y equilibrado. En este sentido, y a los efectos de evitar futuras situaciones de conflicto, proponemos la celebración de una gran CUMBRE HISPANO-MARROQUÍ en un plazo no superior a un año, que determine definitivamente los ejes políticos de colaboración vigentes entre nuestros países. Los falangistas creemos que es necesario reformular el marco de nuestras relaciones con Marruecos y, sólo si ello no fuera posible, acentuar nuestra política de presión gradual sobre nuestro vecino, a los efectos de ir mitigando, de forma progresiva, los problemas derivados del tráfico inhumano de personas hacia nuestras costas, el tráfico de drogas y la presión política y militar sobre nuestros enclaves africanos. En este sentido, entendemos necesario el fortalecimiento de nuestras inversiones en el Reino vecino, al objeto de aumentar la situación de dependencia económica con respecto a España.

LA FALANGE (FE) defiende el viejo sueño de la HISPANIDAD, entendida como una agrupación confederal de países de cultura hispánica dotados de una política defensiva, comercial y económica común. El Estado Español fomentará toda clase de medidas tendentes al fortalecimiento de estos lazos políticos y económicos, los cuales deben desenvolverse en ua doble dirección: de un lado, incrementar tanto los mecanismos políticos de colaboración como apoyar la creación de nuevos instrumentos conjuntos y, de otro, apoyar los mecanismos de expansión y penetración hispana en los países del entorno anglosajón: en especial, los que suponen la defensa de la cultura hispana dentro de los Estados Unidos (asociaciones de inmigrantes dentro de USA, independencia de Puerto Rico, defensa del español como lengua oficial, estudio de la influencia española en la cultura e historia estadounidenses). Los falangistas entendemos plenamente integrantes en esta gran comunidad hispánica de naciones a las naciones hermanas de Portugal y de Brasil, así como el resto de ámbitos territoriales de presencia histórica y cultural portuguesa.

LA FALANGE (FE) rechaza expresamente la denominada ALIANZA DE CIVILIZACIONES, al considerar esta iniciativa internacional española como absolutamente carente de contenido y de aplicaciones políticas prácticas. Los falangistas propugnamos una política de intervención económica de inversión infraestructural en los países del llamado TERCER MUNDO, mediante la aplicación de un porcentaje fijo anual del PIB español en programas de desarrollo e industrialización de países hispanoamericanos, subsaharianos y magrebíes. Los falangistas nos mostramos partidarios de la aplicación del 0,7% a los proyectos de colaboración internacional de ayuda y desarrollo. En este sentido, entendemos que España debe extremar su colaboración humana y económica con las Naciones del Sur: la simple existencia de esta situación inhumana, y la constatación del actual e intolerable estado de cosas, constituye la demostración práctica del fracaso del modelo capitalista.

LA FALANGE (FE) estima que España tiene una deuda histórica con la población del SAHARA OCCIDENTAL y, en consecuencia, debe apoyar incondicionalmente no sólo la celebración de un REFERENDUM DE AUTODETERMINACIÓN, en el cual pueda votar toda la población saharaui -y no sólo la determinada por Marruecos- sino que debe reconocer de manera inmediata a la REPUBLICA ARABE SAHARAUI DEMOCRÁTICA (RASD), prestándola apoyo incondicional de carácter económico y militar frente a las pretensiones marroquíes. En este sentido, y a los efectos de garantizar la plena independencia saharaui, los falangistas estimamos indispensable la instalación de bases militares españolas dentro de las llamadas Provincias Meridionales, a los solos efectos de prestar apoyo militar defensivo a esta República hermana. Asimismo, deben intensificarse los programas de ayuda económica y asistencial a la población de la RASD, concluyendo de forma inmediata un Tratado de Doble Nacionalidad entre nuestros dos países.