Lo que le viento se llevó...siempre vuelve.

Muy buena reflexión la que se puede leer en la Revista Ejército del mes de marzo de 2008 bajo el título: "Lo que le viento se llevó" . El autor, Comandante González Martín, es profesor de estrategia en la Escuela Superior de las FAS .

Desgracidamente la Revista Ejército, pese a ser financiada por el erario público y no tener ninguna clasificación de seguridad, no está disponible electrónicamente para que los ciudadanos que la pagan puedan consultar, conocer, criticar y , en su caso, corregir aquello que sus militares opinan. Me imagino que será para cobrar suscripciones a aquellos que ya la han pagado a través de sus impuestos.

Precisamente el autor reflexiona sobre la perversión que supone la separación entre lo militar y lo civil, entre el qué y el porqué, entre el coraje moral y el servilismo, entre el automatismo y la reflexión.

Me temo que no aborda el asunto de que , a veces, son las sociedades -y sus élites gobernantes- las que prefieren que lo militar permanezca inanimado, y por tanto, eligen los mejores autómatas para gobernar y seleccionar a los mejores...autómatas. Citándo al Cte González: "Todo lo anterior tiene algo que ver también con el sistema de formación. Generalmente, las escuelas militares de altos estudios no son centros para desarrollar la autocrítica profunda o reformular la doctrina, sino foros para la transmisión de la política existente".

Sí, así es. Pero no tiene por qué cambiar. A veces el fracaso del binomio político-militar es completamente premeditado, porque el conocer que existe un grave problema, no es sinónimo de querer resolverlo.

Sobre "lo que el viento se llevó" y el gran cambio en la guerra actual que el autor defiende, ya se sabe mi opinión. Ha sido nuestra falta de preparación -humanística principalmente- la que ha facilitado el shock en el que parece que nos encontramos. La educación de autómatas de la Guerra Fría que todos recibimos, es la que nos ha impedido ver con claridad que la Guerra siempre fue HÍBRIDA. Desde David frente a Goliat, desde los cántrabos frente a los romanos, desde Espoz y Mina frente los napoleónicos...hasta Petraeus contra Moqtada al Sadr.

En realidad era la convencional Guerra Fría, para la que tanto nos prepararon, la que nunca fue una Guerra.