
"The administration has stopped using the phrase, and that speaks for itself, obviously." ha afirmado Hillary Clinton a bordo del avión que la trasladaba a Europa para asistir a la cumbre de la Haya. Con esta sencilla pero importante declaración "La administración ha dejado de usar esta expresión, y eso obviamente habla por si mismo" la Secretaria de Estado de EEUU da por finalizada la Guerra Global contra el Terrorismo (GWOT), expresión que inventó el binomio Cheney-Rumsfeld para denominar a las operaciones militares que se desarrollaron a lo largo y ancho del planeta para luchar contra el terrorismo islamista global tras los brutales atentados del 11 de septiembre de 2001. La expresión que se utilizará en el futuro para referirse a estas operaciones -que no por ello dejarán de desarrollarse- será operaciones de contingencia exterior.
Con este gesto -que tiene además su primer reflejo práctico en la reciente estrategia AfPak- el gobierno de EEUU acaba con un término que intelectualmente era tremendamente inconsistente y que incomodaba a todos los aliados -musulmanes y occidentales- de ese país en la lucha contra el terrorismo yihadista global que pretendía liderar. ´Pero este anuncio no es una ruptura con la política de seguridad desarrollada hasta ahora, en realidad sólo es la certificación de una defunción que se produjo cuando Robert Gates fue nombrado por el presidente Bush como Secretario de Defensa allá por 2006 ante el estrepitoso fracaso en Irak y Afgansitán al que había dirigido Rumsfeld a la maquinaria de seguridad y defensa más potente de la historia .
Este observador todavía recuerda la conversación que le dio pie para escribir la entrada "Las guerras que nunca fueron y la larga lucha contra el yihadismo global". En ella este observatorio afirmaba :
"Así, poco a poco, de forma tranquila pero determinante, el discurso de la GWOT (guerra global contra el terrorismo), la pamema de la extensión global de la democracia y el banderín de enganche de la defensa de la civilización occidental frente al bárbaro exterior, van languideciendo y desaparecen de las estrategias que desarrollamos a día de hoy y desarrollaremos en el futuro.
Y todo lo anterior no significa que no habrá que combatir. No significa desde luego que no habrá que utilizar fuerzas militares en diversos teatros, no significa que no necesitaremos ejercer la violencia en confusos escenarios; más bien al contrario, más bien significa que proliferarán las acciones militares en muchos lugares alejados, desconocidos y sin vigilancia que nuestros adversarios ocuparán. Pero no en "guerras" y no aisladamente.
La lucha contra el terrorismo yihadista global será larga, confusa, incierta e híbrida. Pero no será una guerra, será simple y llanamente una lucha que deberán librar todas las herramientas disponibles de los estados afectados en franca coordinación. España a la cabeza aportando su desgraciadamente dilatada experiencia."

Este viraje semántico es probable que contente a muchos progresistas y disguste a muchos neocones acá en Europa pero conviene decir a unos y otros que ni garantiza ningún éxito per se ni significa acabar con ninguna de las operaciones en marcha. En todo caso no hace más que cambiar definitivamente el enfoque casi exclusivamente militar que presidió la acción inicial de Bush por uno decididamente integral: más recursos económicos, más cooperación, más herramientas civiles, más diplomacia y más inteligencia.
En definitiva más implicación en esta lucha global; lo cual obligará también a todos aquellos que aspiren a ser sus aliados estrechos, España y su gobierno también. Aún más compromiso y seguro con más claridad, apoyo y determinación. Y con al menos la misma valentía con la que las tropas españolas que aparecen en las fotos insertadas responden al fuego talibán en Afganistán.
Y habrá de hacerse con cautela -esta vez- porque el nuevo enfoque estadounidense tampoco garantiza la victoria. Conviene leer al respecto los vaticinios de algunos expertos en el nada sospechoso ISN sobre la nueva estrategia AfPak y las dificultades que generará y encontrará en Oriente Medio: "AfPak Strategy Solves Nothing" y "Costs of War: Attempting the Impossible". Serias advertencias de que el camino será largo, difícil y costoso. Y el éxito no estará garantizado aun incluso si el Presidente Obama consiguiese un serio compromiso por parte de todos los países involucrados.
En definitiva más implicación en esta lucha global; lo cual obligará también a todos aquellos que aspiren a ser sus aliados estrechos, España y su gobierno también. Aún más compromiso y seguro con más claridad, apoyo y determinación. Y con al menos la misma valentía con la que las tropas españolas que aparecen en las fotos insertadas responden al fuego talibán en Afganistán.
Y habrá de hacerse con cautela -esta vez- porque el nuevo enfoque estadounidense tampoco garantiza la victoria. Conviene leer al respecto los vaticinios de algunos expertos en el nada sospechoso ISN sobre la nueva estrategia AfPak y las dificultades que generará y encontrará en Oriente Medio: "AfPak Strategy Solves Nothing" y "Costs of War: Attempting the Impossible". Serias advertencias de que el camino será largo, difícil y costoso. Y el éxito no estará garantizado aun incluso si el Presidente Obama consiguiese un serio compromiso por parte de todos los países involucrados.
P.S: También aquí en España surgen voces documentadas que advierten de los peligros que nos esperan por el camino que se ha elegido. Carlos Echevarria en GEES: "La peligrosa aceptación de los islamistas como supuesto factor de estabilidad".